Nunca juzgues un libro por su portada. O por su título. ¿No os ha pasado alguna vez que os sentís atraídos por un libro y luego no responde a vuestras expectativas? O todo lo contrario: libros que parecen anodinos y se convierten en grandes compañeros. Debo reconocer que yo me he llevado unas cuantas desilusiones. Pero no siempre es así: algunas veces, por suerte, encuentras verdaderas joyas.
Hace un tiempo me llamó la atención el escaparate de una librería en el que había dos libros de gran formato, con unas llamativas ilustraciones de estilo vintage y títulos simples: "Esto es Nueva York" y "Esto es Londres". Fue amor a primera vista.
Bastó una rápida hojeada para confirmar que la primera impresión había sido buena. Así que al llegar casa empecé a investigar por Internet quién era ese M. Sasek que firmaba los libros. Lo primero que descubrí buceando por diferentes blogs fue que yo no era la única que había tropezado con esos libros por casualidad y que había quedado impresionada. Una de esas personas es Anne, que se topó con un ejemplar de "This is London" en un saldo y acabó creando el blog This is Sasek, en el que hay una gran recopilación de las obras de este autor checo y sus reediciones actuales. Por supuesto, decidí convertirme en la orgullosa propietaria de "Esto es Londres" inmediatamente.
Miroslav Sasek nació en Praga en 1916, aunque tras la Segunda Guerra Mundial y la llegada de los comunistas al poder en su país acabaría exiliándose en Múnich. Tras un viaje a París se dio cuenta de que no existían guías de viaje para niños y se propuso hacer una; en 1959 salió a la luz "This is Paris". Tras el éxito obtenido por este primer título llegarían "This is London" y "This is Rome", y la que comenzó como una serie de tres capitales europeas acabó siendo un precioso viaje alrededor del mundo con un total de dieciocho paradas - Nueva York, Edimburgo, Irlanda, San Francisco, Grecia, Australia, Texas o Wahington D.C., entre otras.
Sasek estudió arquitectura y posteriormente bellas artes, y eso se aprecia en sus ilustraciones. El mundo de Sasek es sencillo, casi esquemático. Como introducción a cada ciudad hay una panorámica en la que, entre cientos de cuadraditos de colores que representan los edificios de la misma, se destacan las siluetas de los monumentos a modo de seña de identidad. Me encantan esos "planos" al estilo Sasek. Una ciudad a vista de pájaro, o una ciudad en abstracto. Como cuando pegamos nuestras caras a la ventanilla del avión al sobrevolar nuestro destino y vamos señalando lo que reconocemos: "¡¡Allí!! ¡La Torre Eiffel!". O el London Eye, o el Colisseo... Por un momento volvemos a ver las ciudades como los niños que fuimos, con la ilusión del descubrimiento. Luego, por supuesto, nos bajamos del avión, nos parapetamos detrás de una cámara de fotos y nos comportamos como los adultos responsables que somos. Una pena.
Como dijimos, el mundo de los libros de Sasek es un mundo sencillo, pero al mismo tiempo lleno de detalles. De ese tipo de detalles que les encantan a los niños. Porque lo que más me gusta de sus libros es que miran el mundo a través de los ojos de un niño y se paran no sólo en las principales atracciones turísticas del país o la ciudad en cuestión, sino en esas escenas cotidianas que los peques saben convertir en verdaderas aventuras. Por ejemplo, la cola en la parada del autobús, los pintores callejeros, las palomas de San Marcos o los restaurantes de comida rápida. Además, las ilustraciones van acompañadas de breves textos con los datos suficientes para captar la atención de los más pequeños sin dejar de ser didácticos. Textos amenos y con un punto de ironía que te arrancan una sonrisa.
Como dijimos, el mundo de los libros de Sasek es un mundo sencillo, pero al mismo tiempo lleno de detalles. De ese tipo de detalles que les encantan a los niños. Porque lo que más me gusta de sus libros es que miran el mundo a través de los ojos de un niño y se paran no sólo en las principales atracciones turísticas del país o la ciudad en cuestión, sino en esas escenas cotidianas que los peques saben convertir en verdaderas aventuras. Por ejemplo, la cola en la parada del autobús, los pintores callejeros, las palomas de San Marcos o los restaurantes de comida rápida. Además, las ilustraciones van acompañadas de breves textos con los datos suficientes para captar la atención de los más pequeños sin dejar de ser didácticos. Textos amenos y con un punto de ironía que te arrancan una sonrisa.
Quizás el contrapunto nostálgico es que los libros que conforman la colección "This is..." hablan de un mundo que ya no existe. Los monumentos siguen en pie, pero los personajes que pasean por las calles de sus ciudades dejaron de hacerlo hace tiempo. Era un mundo chic, algo elitista, y el turismo de masas tal y como hoy lo conocemos (y lo sufrimos) no existía. De hecho, viajar a los destinos que Sasek nos propone estaba al alcance de muy pocos. Sus guías eran la mejor manera de viajar para muchos niños, soñando desde el sofá de sus casas con lugares lejanos y con sus habitantes.
Durante los años 60 y 70 estos libros fueron muy populares, especialmente en los países anglosajones, aunque también se publicaron en España. Por desgracia nuestro país no forma parte de ese selecto club de paradas en la vuelta al mundo de Sasek. Quizás nuestras ciudades eran aún demasiado grises para el colorido universo que él nos propone. En el 2003, la editorial norteamericana Rizzoli comenzó a reeditar las guías, que en el 2011 llegaron a nuestro país de la mano de la editorial El Patito. Me encanta que estos libros se hayan reeditado, para que los podamos disfrutar los que no tuvimos la suerte de leer los originales. Sin embargo, me hago una pregunta: ¿son esta reediciones "retro" para niños o para adultos? ¿Se sienten los niños de hoy en día realmente atraídos por esa estética vintage que a algunos mayores nos vuelve locos? Supongo que las respuestas darían para otro post, pero queda pendiente para otro día. Ahora me espera un paseo como un gato por las calles de París.
Durante los años 60 y 70 estos libros fueron muy populares, especialmente en los países anglosajones, aunque también se publicaron en España. Por desgracia nuestro país no forma parte de ese selecto club de paradas en la vuelta al mundo de Sasek. Quizás nuestras ciudades eran aún demasiado grises para el colorido universo que él nos propone. En el 2003, la editorial norteamericana Rizzoli comenzó a reeditar las guías, que en el 2011 llegaron a nuestro país de la mano de la editorial El Patito. Me encanta que estos libros se hayan reeditado, para que los podamos disfrutar los que no tuvimos la suerte de leer los originales. Sin embargo, me hago una pregunta: ¿son esta reediciones "retro" para niños o para adultos? ¿Se sienten los niños de hoy en día realmente atraídos por esa estética vintage que a algunos mayores nos vuelve locos? Supongo que las respuestas darían para otro post, pero queda pendiente para otro día. Ahora me espera un paseo como un gato por las calles de París.